«Jóvenes de Manos Unidas abriendo fronteras. Migraciones, sueños y dignidad humana» es sensibilización y educación para el desarrollo, y muestra a las nuevas generaciones de jóvenes voluntarios el trabajo de nuestra ONG en el terreno, conectando sus implicaciones en nuestra vida cotidiana.
Saltar una valla y cruzar una frontera es el último obstáculo que las personas migrantes afrontan al dejar atrás territorio africano y el primero que hacen frente en suelo europeo.
Conscientes de los riesgos que los migrantes sufren al adentrarse en un viaje lleno de peligros, Manos Unidas trabaja en distintos puntos del continente africano, junto a sus socios locales, para tratar la cuestión migratoria de manera integral con el objetivo de sensibilizar, prevenir y mejorar sus condiciones de vida.
Uno de esos puntos se encuentra en Nador, Marruecos, una ciudad fronteriza con Melilla por donde cada día pasan muchas de las personas migrantes que buscan llegar a España y a Europa. Allí, Manos Unidas apoya en el Centro Baraka, junto a la Delegación Diocesana de Migraciones de Tánger, proyectos de formación profesional dirigidos a jóvenes en situación de vulnerabilidad con el objetivo de mejorar su empleabilidad dentro del país y reducir la exclusión social que puedan sufrir.
Además, Manos Unidas contribuye, en Nador, a mejorar el acceso de los migrantes irregulares a los servicios sociales básicos (sanidad, educación, vivienda); proporcionando, entre otras cosas, atención psicosocial y sanitaria.
Descubre el trabajo de Manos Unidas en Nador
Impulsados por la recién aprobada Estrategia de Manos Unidas con Voluntariado Joven (EVJ) 2023-2027, el Departamento de Campañas, Incidencia y Trabajo en Red ha puesto en marcha una experiencia para que un pequeño grupo de jóvenes voluntarios puedan conocer de primera mano el impacto que el trabajo de Manos Unidas tiene. En esta ocasión, han conocido desde dentro los talleres que ofrece el Centro Baraka y a algunas de las personas que lo hacen posible.
Esta vivencia pretende profundizar en la formación de los jóvenes en Educación para el Desarrollo y, específicamente, en la cuestión migratoria y sus implicaciones sociales a nivel internacional y nacional. Para completar la experiencia, los jóvenes voluntarios, junto a los miembros del Departamento de Campañas, han visitado también dos ciudades españolas en las que la huella de la inmigración está muy presente: Almería y Melilla.
La participación de otras organizaciones en la formación de esta experiencia ha sido esencial para que los jóvenes voluntarios comprendan todas las fases del proceso migratorio y sus causas y consecuencias. Por otro lado, el apoyo del Departamento de Proyectos de Manos Unidas ha sido clave para poder realizar esta actividad.
Esta actividad de Educación para el Desarrollo se ha podido realizar gracias al apoyo especial del Departamento de Proyectos y en colaboración con: