Vicenta Jover recibía hace algunas jornadas, y de manera sorpresiva, por parte de sus compañeras de Petrer, una placa en la que se reconocía su labor abnegada durante 40 años a favor de Manos Unidas.
Para Vicenta fue una sorpresa ya que fue al término de un retiro espiritual cuando se le entregó la referida placa en un acto en el que sus compañeras quisieron manifestarle el cariño y reconocimiento a esos años de dedicación, entrega y esfuerzo por los demás, desde que en 1975 sustituyó a Mercedes Navarro como responsable de Manos Unidas en Petrer. Durante el homenaje, Vicenta, que definía su relación con Manos Unidas como de un enamoramiento instantáneo, pudo escuchar en boca de sus compañeras un recordatorio temporal de todo lo realizado a lo largo de tantos años, además de palabras alabatorias sobre su bondad, integridad, sencillez y cercanía. Hubo también unas palabras de recuerdo al apoyo de su marido Ricardo.