Colecta solidaria con Manos Unidas en Santa Eulàlia de Provençana

La colecta anual para Manos Unidas se ha adelantado en la Parroquia de Santa Eulàlia de Provençana, ya que así se evita que coincida con la celebración de su patrona.

Durante la homilía, el padre comboniano Eugenio Yao Nordjoe alabó el papel destacado de Manos Unidas en la lucha contra el hambre. Yago explicó que Manos Unidas colabora en Togo desde 1975, donde ha llevado a cabo diversos proyectos educativos, de salud, seguridad alimentaria y de protección de la mujer. El padre Yao presentó el proyecto que Manos Unidas está llevando a cabo en Lomé, que es la ampliación de un centro educativo

El padre contó que a la Iglesia le ocurre como a Jesús en el evangelio: cuando acusa a sus interlocutores de falta de fe, le quieren despeñar. Cuando la Iglesia clama contra las injusticias que están en la causa del hambre en el mundo, incomoda a los poderosos y tiene el peligro de ser perseguida o expulsada de los terrenos de misión.

El grupo parroquial de Manos Unidas tuvo un lugar protagonista en la celebración de la eucaristía: María Vergés leyó la monición inicial, María José hizo lo propio con la primera lectura y Mari Ángeles las plegarias.

Al final de la celebración, varias personas mostraron su interés en colaborar con el grupo parroquial de Manos Unidas.

Por su parte, Paco Marro, voluntario de Manos Unidas Barcelona dirigió unas palabras a los asistentes en nombre de Joan Martí, presidente de dicha delegación. Marro resaltó la providencial coincidencia de la campaña de Manos Unidas con la fiesta de Santa Eulàlia. También comparó la voluntad decidida del grupo de mujeres que iniciaron la organización para luchar contra el hambre en el mundo con la valentía de Santa Eulalia, y destacó el papel de la mujer y del carisma femenino en la entrega desinteresada a las personas que pasan hambre en el mundo.

A continuación, Paco Marro presentó el proyecto de Soddo (Etiopía). El proyecto de Soddo es de seguridad alimentaria, y busca dar soporte a familias campesinas que viven en condiciones muy difíciles y se sustentan de la agricultura y la ganadería.

La intervención del señor Marro terminó con una llamada a ser generosos y a comprobar cómo, con una pequeña aportación de cada uno de los asistentes, se pueden hacer milagros en la lucha contra el hambre.

Texto de Paco Marro (editado por Hugo Pérez Marsol)

Galería de imágenes: 

Suscríbete a la newsletter

Informarse es el primer paso para actuar.

Suscríbete