En el marco de la celebración del día internacional de la mujer, se ha llevado a cabo, en la tarde de ayer 7 de marzo, en el Antiguo Casino de Ciudad Real, una mesa redonda con la participación de siete mujeres representativas del mundo de la empresa, la universidad, el deporte y el asociacionismo. Un espacio organizado conjuntamente por el Club Balonmano Caserío, Basket Cervantes y Ciudad Real Deporte, al que han asistido la alcaldesa de Ciudad Real y otras autoridades provinciales y locales.
Han participado en la mesa: la vicerrectora de Comunicación de la Universidad de Castilla-La Mancha, Leonor Gallardo, la presidenta de Manos Unidas Ciudad Real, Concepción Martínez, la secretaria del Colegio de Farmacéuticos de Castilla-La Mancha, Ana López Casero; Encarnación Medina de AFAMMER, Domenyka Hoyos, empresaria y miembro del grupo BNI ACR Productividad, Silvana Daguerre de ID Energy Group y la presidenta de la Federación de Balonmano de Castilla-La Mancha, María López.
Tras la intervención de la alcaldesa, Eva María Masías, que animó a seguir celebrando el 8M para visibilizar, sensibilizar y reivindicar el papel de la mujer en todos los ámbitos, dio comienzo las intervenciones de las siete “mujeres maravillosas”, como así fueron denominadas por la psicóloga que moderó la mesa, que dieron a conocer a los asistentes sus experiencias vitales, sus luchas para abrirse paso en ámbitos como la familia, la educación, el trabajo, el deporte en un mundo de hombres, trasladando al auditorio valores y consejos como la constancia, el tesón, la necesidad de formación, así como la importancia de la libertad y la independencia.
La última intervención estuvo a cargo de nuestra presidenta diocesana de Manos Unidas, Conchi Martínez, quien comenzó poniendo de manifiesto la importancia del papel de la mujer a nivel mundial, a través de un proverbio africano: “Los brazos de las mujeres sostienen el cielo, si las mujeres bajasen los brazos, el cielo caería sobre la cabeza de todo el mundo”, subrayando que el desarrollo de la mujer descansa en el reconocimiento de su propia dignidad. Manifestó que la igualdad necesita un modelo de desarrollo integral, que implica la colaboración real entre hombre y mujer, para juntos contribuir al desarrollo político, económico, social y cultural, en definitiva, trabajar para el bien común, y beneficiarse, mujeres y hombres, de los resultados. Argumentó que la base de la igualdad entre hombre y mujer está en la educación; habló de la importancia de la educación en igualdad desde la infancia, la educación en valores y, sobre todo, la necesidad de incluir al hombre en la lucha por la igualdad de la mujer, la igualdad de sexos, huyendo de contraponer a ambos. Añadió que en Manos Unidas creemos firmemente en la igualdad entre el hombre y la mujer, que las mujeres y los hombres tienen los mismos derechos y deben tener las mismas oportunidades, y así MMUU defiende la igualdad desde la base de la equidad y la justicia.
En torno a unas 100 personas asistieron al acto.
