Organizado y coordinado por la Delegación de Manos Unidas se ha llevado a cabo este proyecto socio-educativo, subvencionado por el Ayuntamiento de C. Real, en convocatoria para proyectos de sensibilización 2023. Con la intervención educativa del narrador de historias, Aldo Méndez, muy reconocido en nuestra ciudad; con una extensa y prestigiosa trayectoria profesional contando historias, impartiendo talleres y colaborando con proyectos socioculturales, artísticos y pedagógicos en España y otros muchos países de Latinoamérica.
Ha consistido en la realización de 3 talleres -Todo lo que imaginamos es cierto; Todos contamos; Todos somos uno-, con cada grupo clase, de los niveles educativos de 5º y 6º de Primaria, en sesiones de hora y media, los días: 14 de diciembre de 2023, 8 y 15 de febrero y 11 de abril de 2024, en el Colegio Hermano Gárate; y los días 10, 17 de abril y 2 de mayo de 2024, en el CEIP Cruz Prado. Han participado 44 y 60 alumnos y alumnas respectivamente.
El OBJETIVO del Proyecto: promover valores y actitudes comprometidas con la igualdad, la no violencia, la cooperación y la justicia, y fomentar la cultura de la solidaridad. Lo fundamental no ha sido el desarrollo del potencial artístico, sino, sobre todo, la formación en valores a través del propio proceso, basado en la escucha, la interacción y el trabajo en equipo y lo que supone: un esfuerzo colectivo para el desempeño de una tarea, inventar un cuento para contar a los demás. La narración oral ha sido como disparador de los procesos creativos; la creación de un cuento en equipo para compartir ha sido la motivación para unir esfuerzos por un bien común.
Hemos podido escuchar variadas historias y cuentos contados por Aldo, que han servido de inspiración para el proceso creativo. Con una metodología basada en los tres momentos fundamentales de educación para el desarrollo -sentir, pensar y actuar-, los talleres han supuesto un acercamiento lúdico y poético de los participantes a la palabra, como fuente creadora de otros mundos posibles; y la exteriorización de sentimientos, emociones y actitudes sobre comportamientos y conductas solidarias. A través de ejercicios y técnicas de animación los participantes han elegido los personajes y los temas a tratar para elaborar sus textos creativos (cuentos e historias), y cada grupo ha elegido uno o varios portavoces para narrar su historia. En la última sesión, el monitor - todos también opinan- fue dando pautas para mejorar lo que no estaba bien e indicaciones para la forma de narrar; y, finalmente, los participantes decidieron los portavoces que pudieran expresar el sentir común y narrar en público los cuentos creados.
A lo largo de las sesiones han escuchado cuentos y han trabajado en equipo en la elaboración y la representación del cuento, de forma colaborativa, compartiendo los talentos de cada uno o una; y en la jornada final del proyecto, se han encontrado los dos colegios para compartir los relatos. Han conocido el valor de la solidaridad y lo que significa, practicando la solidaridad: un acto de confianza en el otro, de participar, de compartir, y resolver un problema juntos, mediante la empatía, el respeto a la opinión del otro y llegar a acuerdos, la amabilidad, el pedir disculpas; además, a través del trabajo en equipo han podido vivenciar la ayuda al más débil; cada uno ha puesto su “talento” al servicio de los demás. Competir no nos hace solidarios, sino compartir lo que tenemos. Lo fundamental; la colaboración y la ayuda.
El Proyecto concluyó el 16 de mayo, en el auditorio del Antiguo Casino de C. Real, con una Jornada, encuentro del alumnado de los dos centros educativos, acompañados por profesores y algunos familiares, en la que contaron sus cuentos a todos los demás. Una actividad entrañable, a la que también asistieron la concejala de Servicios Sociales Aurora Galisteo y Nuria Iglesias, de los Servicios Centrales de Manos Unidas. Al final, la presidenta diocesana, Conchita Martínez hizo entrega de un diploma de participación y un lote de cuentos de Manos Unidas a cada grupo escolar.
Por medio de cuentos e historias, los chicos y chicas potencian rasgos tan importantes en su crecimiento personal como la imaginación, la sociabilización y la formación en valores. Creemos que la forma más eficaz de educar en solidaridad a partir de un cuento, no es su carácter moralizante, sino que la solidaridad se expresa en la propia esencia del cuento que es, en definitiva, la resolución de un conflicto. Por otro lado, la solidaridad se aprende practicándola, el trabajo en equipo es un contexto adecuado para hacerlo.
Organizado y coordinado por la Delegación de Manos Unidas se ha llevado a cabo este proyecto socio-educativo, subvencionado por el Ayuntamiento de C. Real, en convocatoria para proyectos de sensibilización 2023. Con la intervención educativa del narrador de historias, Aldo Méndez, muy reconocido en nuestra ciudad; con una extensa y prestigiosa trayectoria profesional contando historias, impartiendo talleres y colaborando con proyectos socioculturales, artísticos y pedagógicos en España y otros muchos países de Latinoamérica.
Ha consistido en la realización de 3 talleres -Todo lo que imaginamos es cierto; Todos contamos; Todos somos uno-, con cada grupo clase, de los niveles educativos de 5º y 6º de Primaria, en sesiones de hora y media, los días: 14 de diciembre de 2023, 8 y 15 de febrero y 11 de abril de 2024, en el Colegio Hermano Gárate; y los días 10, 17 de abril y 2 de mayo de 2024, en el CEIP Cruz Prado. Han participado 44 y 60 alumnos y alumnas respectivamente.
El OBJETIVO del Proyecto: promover valores y actitudes comprometidas con la igualdad, la no violencia, la cooperación y la justicia, y fomentar la cultura de la solidaridad. Lo fundamental no ha sido el desarrollo del potencial artístico, sino, sobre todo, la formación en valores a través del propio proceso, basado en la escucha, la interacción y el trabajo en equipo y lo que supone: un esfuerzo colectivo para el desempeño de una tarea, inventar un cuento para contar a los demás. La narración oral ha sido como disparador de los procesos creativos; la creación de un cuento en equipo para compartir ha sido la motivación para unir esfuerzos por un bien común.
Hemos podido escuchar variadas historias y cuentos contados por Aldo, que han servido de inspiración para el proceso creativo. Con una metodología basada en los tres momentos fundamentales de educación para el desarrollo -sentir, pensar y actuar-, los talleres han supuesto un acercamiento lúdico y poético de los participantes a la palabra, como fuente creadora de otros mundos posibles; y la exteriorización de sentimientos, emociones y actitudes sobre comportamientos y conductas solidarias. A través de ejercicios y técnicas de animación los participantes han elegido los personajes y los temas a tratar para elaborar sus textos creativos (cuentos e historias), y cada grupo ha elegido uno o varios portavoces para narrar su historia. En la última sesión, el monitor - todos también opinan- fue dando pautas para mejorar lo que no estaba bien e indicaciones para la forma de narrar; y, finalmente, los participantes decidieron los portavoces que pudieran expresar el sentir común y narrar en público los cuentos creados.
A lo largo de las sesiones han escuchado cuentos y han trabajado en equipo en la elaboración y la representación del cuento, de forma colaborativa, compartiendo los talentos de cada uno o una; y en la jornada final del proyecto, se han encontrado los dos colegios para compartir los relatos. Han conocido el valor de la solidaridad y lo que significa, practicando la solidaridad: un acto de confianza en el otro, de participar, de compartir, y resolver un problema juntos, mediante la empatía, el respeto a la opinión del otro y llegar a acuerdos, la amabilidad, el pedir disculpas; además, a través del trabajo en equipo han podido vivenciar la ayuda al más débil; cada uno ha puesto su “talento” al servicio de los demás. Competir no nos hace solidarios, sino compartir lo que tenemos. Lo fundamental; la colaboración y la ayuda.
El Proyecto concluyó el 16 de mayo, en el auditorio del Antiguo Casino de C. Real, con una Jornada, encuentro del alumnado de los dos centros educativos, acompañados por profesores y algunos familiares, en la que contaron sus cuentos a todos los demás. Una actividad entrañable, a la que también asistieron la concejala de Servicios Sociales Aurora Galisteo y Nuria Iglesias, de los Servicios Centrales de Manos Unidas. Al final, la presidenta diocesana, Conchita Martínez hizo entrega de un diploma de participación y un lote de cuentos de Manos Unidas a cada grupo escolar.
Por medio de cuentos e historias, los chicos y chicas potencian rasgos tan importantes en su crecimiento personal como la imaginación, la sociabilización y la formación en valores. Creemos que la forma más eficaz de educar en solidaridad a partir de un cuento, no es su carácter moralizante, sino que la solidaridad se expresa en la propia esencia del cuento que es, en definitiva, la resolución de un conflicto. Por otro lado, la solidaridad se aprende practicándola, el trabajo en equipo es un contexto adecuado para hacerlo.
Damos GRACIAS a los colegios por la buena acogida, a su profesorado por la colaboración y
FELICITAMOS a todos los chicos y chicas que han participado poniendo todo su empeño y talento en compartir con los demás.
Reiteramos la valoración que expresan los diplomas que han recibido:
En reconocimiento por vuestra participación sobresaliente en este Proyecto de Educación para el Desarrollo.
Por vuestro trabajo en equipo compartiendo respeto, empatía y colaboración para la creación de un cuento que representa LA SOLIDARIDAD.
