En la tarde del pasado 13 de marzo, en la Parroquia de Santa María del Prado, de Ciudad Real, un grupo de unas 50 personas, nos reunimos para celebrar la Vigilia de oración que anualmente organiza el arciprestazgo de Ciudad Real, con motivo de la Campaña contra el hambre, cuyo lema de este año es: “El efecto ser humano”, con objeto de tomar conciencia de cómo nuestros estilos de vida y de consumo están favoreciendo una crisis medioambiental, con consecuencias desastrosas para las poblaciones más vulnerables. Una vigilia que en la línea del contenido de la Campaña 2024 ha tenido como lema: “frente a la desigualdad medioambiental, justicia climática”. Se ha reflexionado sobre textos extraídos de la encíclica “Laudato Sí” del Papa Francisco y la carta apostólica “Octogésima Adveniens”, del Papa Pablo VI, en torno a que la relevancia de la “Casa Común” en la Iglesia Católica es significativa, ya que se considera que el cuidado del medio ambiente es una responsabilidad moral y ética de los cristianos. La Iglesia Católica ha emitido varias declaraciones y documentos que enfatizan la necesidad de proteger el medio ambiente, porque existe una “íntima relación entre los pobres y la fragilidad del planeta”.
Siguiendo una bella presentación en PowerPoint, de la hermosura de la Creación, se ha realizado la lectura del Génesis, 24-29 y se han recitado a dos coros oraciones como: lágrimas de la Creación, oración de alabanza por la Creación del Papa Francisco, el Cántico de las criaturas de San Francisco de Asís y el Himno: “la casa común, es casa de Dios….”. Se ha orado por las necesidades de la Iglesia y de los pueblos que más sufren las consecuencias del cambio climático y se han proclamado demandas y propuestas en torno a una justicia climática integral.
Se ha finalizado la Vigilia con el vídeo de Campaña, que muestra algunas de las realidades de los efectos del maltrato al planeta y la oración final “por nuestra tierra”, del Papa Francisco.
Nos ha ayudado a orar, la actuación del Coro Hakuna, con cantos como “siempre imagine…”, “Noche” y “qué bien se está, cuando se estábien”.