Manos Unidas de Córdoba celebra su Asamblea diocesana con gran participación de su voluntariado

El sábado 18 de noviembre se dieron cita en la Parroquia de la Trinidad y en sus instalaciones, las voluntarias y voluntarios de nuestra ONGD. Este encuentro anual es una fecha destacada en el calendario de las actividades que la Delegación cordobesa realiza durante el año y que, por estas fechas, pretende ser un punto de encuentro y convivencia entre voluntarios de la diferentes parroquias de la capital y los municipios de la diócesis.

La Asamblea comenzó a las diez horas de la mañana, con una eucaristía en la Iglesia parroquial de San Juan y Todos los Santos. Trinidad, oficiada por su párroco D. José Juan Jiménez Güeto. Segidamente, ya en las instalaciones de esta parroquia, el consiliario diocesano D. Agustín Moreno y la Delegada diocesana, Dª Josefa Iribarnegaray dieron la bienvenida a los asistentes, exponiendo la Delegada las líneas más importantes del Documento Base que la Organización presenta para la próxima campaña. Estas líneas son relativas al cuidado del Medio Ambiente e inspiradas en la encíclica del Papa Francisco Laudato si y en la reciente exhoratación apostólica Laudate Deum. 

A continuación Dª Pilar Jiménez, voluntaria de Manos Unidas en Huelva, expuso su testimonio sobre el reciente viaje de formación que ha realizado junto a otros voluntarios con el fin de visitar, in situ, los proyectos de desarrollo en Marruecos, titulándo su exposición, Manos Unidas puerta a la esperanza: Marruecos. Diferentes departamentos también estuvieron presentes en la Asamblea diocesana, como el de Parroquias, Empresas, información económica y Jóvenes, que presentaron los proyectos que la Delegación asumirá en la Campaña 2024.

El encuentro se clausuró con una emotiva videoconferencia con la religiosa de la congregación de María Inmaculada, Dª Mª Ángeles García, que realiza su labor misionera en Ségou (Mali), donde ellas dirigen una residencia para niñas, escuela y guardería, gracias a la colaboración de Manos Unidas.

Agradecemos con todo nuestro corazón la disponibilidad de Dª Mª Ángeles a la hora de acercarnos la realidad de los jóvenes de Mali, especialmente de las chicas y su dedicación a la hora de proporcionarles un futuro en el que ellas puedan realizarse en igualdad, como personas formadas y autónomas. También agradecemos al párroco y al equipo de voluntarios de la Trinidad, que tan cariñosa acogida nos proporcionaron, atendiendo en todo momento al desarrollo del acto. Igualmente agradecemos a las volutnarias y voluntarias que, desde las diferentes parroquias de la ciudad, como desde municipios a considerable distancia, dedicaron su tiempo del sábaso a este encuentro, así como todas sus energías y corazón, durante el año, a trabajar por los valores de Manos Unidas. ¡Gracias!

 

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