“Venid a mí todos los cansados y agobiados, que yo os aliviaré”
En este mes los voluntarios de Manos Unidas de la diócesis de Getafe consagramos nuestras vidas al Sagrado Corazón de Jesús.
El Amor no es amado.
El que no ama permanece en la muerte y no lleva en sí la vida eterna. En esto hemos conocido el amor: en que él dio su vida por nosotros. También nosotros debemos dar la vida por nuestros hermanos. Pero si uno tiene de que vivir y, viendo a su hermano en necesidad, le cierra sus entrañas ¿Cómo va a estar en él el amor de Dios?
El Amor no es amado.
Amarás a Dios con todo tu corazón y al prójimo como a ti mismo. Tú eres presencia de Dios, amor infinito; pero también lo es tu prójimo; por eso has de amarle como a ti mismo, descubriendo en él a Dios, compartiendo con él tu vida. Comparte alegre lo que tienes dando pan a los hambrientos y tendrás un tesoro en el cielo. Solo quien da la vida por sus hermanos, vive para siempre.
Si los hombres tuviéramos los mismos sentimientos que Jesús tiene en su corazón, no existiría el hambre en el mundo.
El Amor no es amado.
Hermanos que vuestra caridad no sea una farsa. Contribuid en las necesidades de los hermanos, practicar la caridad y la hospitalidad. El que da limosna ofrece verdaderos sacrificios de alabanza. No te presenta ante Dios con las manos vacías. Tu ofrenda por el pobre es aceptada y llega hasta el Altísimo. Honra al Señor con generosidad, no seas mezquino en tus ofrendas, da según tus posibilidades. Da al Altísimo como él te dio. Él nunca lo olvidará. El Señor sabe pagar y te dará el ciento por uno en esta vida y luego la vida eterna. ¿Crees esto?
Tened igualdad de trato unos con otros, sobre todo y especialmente con los pobres. Poneos al nivel de la gente humilde.
El Amor no es amado.
Juan Antonio Montes Paniagua
Presidente delegado de Manos Unidas. Diócesis de Getafe
