La jornada de formación organizada por la Vicaría de Acción Caritativa y Social y sus instituciones -Cáritas, Manos Unidas, Pastoral de las Migraciones, Pastoral Penitenciaria y Pastoral de la Salud- congregó a más de 350 personas el pasado sábado, 29 de noviembre, en el Colegio Virgen Inmaculada Sta. Mª de la Victoria “Gamarra”, bajo el lema “De la desconfianza a la acogida”.
La jornada se centró en las migraciones desde la Alegría del Evangelio, contribuyendo así a la petición del Papa Francisco de renovar nuestras estructuras pastorales, de modo que sean más misioneras, expansivas y abiertas.
Tuvimos dos ponentes de excepción que nos ayudaron a tomar conciencia de la realidad de los emigrantes y de la atención pastoral que les ofrecemos: D. José Manuel Aparicio Malo y D. Francesc Torralba, que centraron su discurso en la apertura de nuestras comunidades al migrante a la luz de la exhortación apostólica “Evangelii Gaudium”.
En este año está dedicado a la Vida Consagrada y tuvimos la oportunidad de conocer mejor la acción que los consagrados religiosos, religiosas y laicos desarrollan en nuestra diócesis en la lucha contra la pobreza y la exclusión, gracias a la presentación que nos ofrecieron dos religiosas pertenecientes a la Confederación Española de Religiosos (CONFER).
Cáritas presentó su campaña institucional “¿Qué haces con tu hermano?” perteneciente a la campaña global “Ama y vive la justicia”, centrada en la pérdida de derechos sociales de nuestro país y en los derechos nunca alcanzados de los países más pobres.
Los talleres, como no pudo ser de otra forma, estuvieron orientados a la reivindicación de los derechos de los inmigrantes, en las principales dificultades que atraviesan y en las claves para su acompañamiento. Nuestra delegación realizó el taller “Adiós África. Razones para emigrar” que presentó y dirigió nuestra delegada Lorena Arranz y en el que contamos con la presencia de dos personas muy importantes, Eddie y Rosemary, que nos contaron cómo fue su viaje desde Nigeria hasta Tarifa para darl el salto más importante de su vida: el comienzo de su nueva vida, llena de esperanza, en España.
Fue un día de lo más provechoso ya que tuvimos la gran oportunidad de compartir nuestras experiencias pastorales entre todos los que tratamos de servir a la Iglesia desde nuestras distintas realidades. El punto final de la jornada lo puso la eucaristía, presidida por el Sr. Obispo, y que finalizó sobre las 8 de la tarde.
