Estimados colaboradores y amigos de Manos Unidas, Con profunda emoción y agradecimiento, me dirijo a ustedes para despedirme de mi cargo como responsable de redes sociales de Manos Unidas Las Palmas. Ha sido un honor y un privilegio formar parte de esta gran familia durante estos últimos años.
En primer lugar, quiero expresar mi más sincera gratitud a todos los voluntarios, colaboradores y donantes, que con su dedicación, compromiso y espíritu altruista, hacen posible la labor de Manos Unidas en cada rincón del mundo.
De manera especial, quiero agradecer a la secretaria de Manos Unidas Las Palmas, Doña Raquel Travieso Llorente, por su invaluable apoyo y colaboración durante todo este tiempo. Su profesionalidad, eficiencia y calidez humana han sido pilares fundamentales en el desarrollo de nuestras actividades.
Quiero extender mi más sincero agradecimiento a Mari Carmen, Conchi y Marga, por su constante apoyo y colaboración. Su amabilidad y disposición siempre me han hecho sentir como en casa.
No puedo olvidar a Jaime y Elena, quienes con su buen humor y alegría han hecho de cada día en La Casa de la Iglesia un momento agradable y memorable. Su amistad ha sido un regalo invaluable.
También tengo un recuerdo para los compañeros y compañeras de la Delegación de Santa Cruz de Tenerife, Asún, Aida, Jorge y Mari Carmen, delegada de Manos Unidas Santa Cruz de Tenerife. Su profesionalismo y compromiso con la causa han sido fundamentales para el éxito de nuestra labor.
Aunque me despido con tristeza, también lo hago con la satisfacción de haber aportado mi granito de arena a la construcción de un mundo más justo y solidario.
Agradezco a Manos Unidas la oportunidad que me ha brindado de ser parte de esta gran familia.
¡Hasta siempre!
Julio Díaz Fajardo