La Misionera sevillana Valle Chía, de la Comunidad de Jesús-María, médico, que ha participado en los actos de presentación de la Campaña en nuestra diócesis, cuenta su testimonio sobre las necesidades en Haití y la ayuda de Manos Unidas.
Estudió en Portaceli, se graduó en la Facultad de Medicina, y está en Jean-Rabel, un municipio del noroeste de Haití.
Ella es la única médico que atiende a catorce poblaciones, con su clínica móvil y un equipo de seis personas, y atiende hasta 4.000 consultas al año.
"La situación allí es desesperada, por la necesidad y la violencia existente, por lo que todo el que tiene la posibilidad sale de allí buscando algo mejor".
Manos Unidas les ha ayudado sufragando la traída de agua de manantial, por lo que están muy agradecidos, y ha dado su testimonio en esta campaña por distintas parroquias de la Diócesis de Sevilla.