La Campaña de Manos Unidas se inició con una misa en la iglesia de San Agustín de Tarragona presidida por el Sr. Arzobispo Joan Planellas y Mn. Jordi Vila, Consiliario de Manos Unidas, a la que asistieron voluntarios, socios, simpatizantes y muchos fieles.
En la homilia, el Sr. Arzobispo hizo mención a la encíclica del Papa Francisco “Laudato sí” donde propone reflexionar sobre los diferentes aspectos de una ecología integral, que incorpore las dimensiones humanas y sociales. Comentó el objetivo de la campaña de Manos Unidas que plantea el reto de alcanzar un planeta sostenible, es decir una casa común en la que podamos vivir con dignidad todos los seres humanos. Agradeció la labor de todos los voluntarios y voluntarias de la ONG a favor de los más pobres y vulnerables, exhortándoles a estar siempre abiertos a las necesidades de los demás.
El mismo viernes 9 de febrero se celebró la jornada de ayuno voluntario en la que Manos Unidas pide a la sociedad un gesto simbólico de apoyo a los 735 millones de personas que pasan hambre en el mundo. Una manera de tomar conciencia del sufrimiento que sufren a diario millones de personas en el mundo, que ayunan involuntariamente porque no tienen alimentos para comer.
