El Foro de Laicos del Arzobispado de Valencia ha organizado diversos actos con motivo del Día Internacional de la Mujer. La jornada, que llevaba por lema “La importancia de ser mujer”, comenzó con una eucaristía en la Iglesia de San Martín, tras lo que tuvo lugar una ponencia en el Salón de Actos de la Vicaría de Evangelización en la calle Avellanas. Esta ponencia fue pronunciada por la delegada de Manos Unidas Valencia, Ana Ruiz Ruiz. Asistió numeroso público, y cómo no los representantes del Foro de Laicos, Eduardo Osca y Pepita Muñoz, entre otros, y se contó también con la presencia de la concejala del Ayuntamiento de Valencia, Marta Torrado.
La conferencia, titulada “Evolución de la Mujer, Feminismo/Hembrismo. La mujer en Manos Unidas”, hizo un repaso histórico para poner en contexto la lucha por los derechos de la mujer y su evolución, pasando por momentos como la petición del derecho al voto y la declaración internacional del Día de la Mujer Trabajadora.
En cuanto a los hitos en España, Ana Ruiz Ruiz señaló la primera vez que las mujeres pudieron votar “una de las grandes impulsoras del sufragio universal fue Clara Campoamor. Junto a Victoria Kent, fueron las primeras diputadas en las Cortes de 1931”, señalo.
Después del recorrido por la evolución de las distintas etapas de la mujer en la historia, Ruiz recordó que “por desgracia los logros de la mujer en occidente no son compartidos por las mujeres de otras latitudes. Esta es la experiencia que gracias a Manos Unidas he comprobado”.
Pilar Belosillo fue la impulsora de la constitución de Manos Unidas, una organización femenina, creada y dirigida por mujeres, incluso sus estatutos están redactados en femenino. Si bien, los hombres tienen cabida y desarrollan labores igualmente importantes.
“La doctrina social de la Iglesia reconoce la misma dignidad de los hombres y de las mujeres como hijos de Dios y exige que todos puedas disfrutar plenamente y con todas las garantías de los derechos humanos”, recordó la delegada de Valencia. Sin embargo, “nacer mujer en muchos países significa ser víctima de trata de personas, de trabajo forzoso, de esclavitud sexual y de servidumbre doméstica”, ha lamentado Ana Ruiz.
Además, “la pandemia –ha destacado Ana Ruiz- ha agravado la situación en los países pobres y está teniendo graves consecuencias económicas y psicológicas en millones de mujeres. El cierre de colegios ha aumentado los casos de abusos contra niñas, el abandono escolar y los embarazos de adolescentes. Ha habido un notable aumento de la violencia dentro y fuera del hogar y un alza en el tráfico de mujeres y niñas”. En definitiva, que niñas y mujeres son las que más pierden, “la pandemia ha traído un empobrecimiento generalizado entre los colectivos más vulnerables, que suelen estar encabezados por mujeres".
La delegada de Manos Unidas Valencia explicó algunos de los proyectos de desarrollo en África: Mali (escuela de enfermeras), Etiopía (microcréditos para montar negocios), Ruanda (semilleros para una cooperativa agrícola), India (contra el tráfico de personas y la trata). En América Latina también se ponen en marcha proyectos para paliar la violencia doméstica, que ayuda a las mujeres a salir del círculo de las agresiones gracias a un cambio de mentalidad y conocimiento de sus derechos.
Para terminar, se entabló un coloquio entre los asistentes. Y finalmente, un grupo de asistentes visitó la sede de Manos Unidas Valencia.
“La pandemia ha traído un empobrecimiento generalizado entre los colectivos más vulnerables, que suelen estar encabezados por mujeres"
Se compone de más de sesenta asociaciones y movimientos femeninos, todos ellos dedicados a obra social y apostolado seglar, a la evangelización y a la promoción de la mujer en el trabajo.
Entre las entidades figuran la Adoración Nocturna Femenina Española, la Asociación de Ayuda Mutua de Viudas “Tabita”, Auxiliares de Jesús Maestro Divino, la Confederación Diocesana de Institutos Seculares, la asociación María Madre de los Sacerdotes, las Mujeres Trabajadoras Cristianas, la Obra Social Femenina de la Virgen de los Desamparados, las Obreras de la Cruz y Vita et Pax, Spei Mater, Caritas, Heraldos del Evangelio, Institución Teresiana, Obra San Juan de Ávila y Manos Unidas.
