Apelando a la solidaridad, las voluntarias de Pego convocaron a sus vecinos a participar en la cena del hambre. El mensaje que hicieron llegar a través de la cartelería es: “entre todos es posible” ayudar a los han tenido menos suerte en la vida y ni siquieran pueden sacaiar el hambre de cada día.
La cena tuvo lugar en el claustro del Convento de los Padres Franciscanos, entre los que asistieron el padre Ángel Talens, que dirigió unas palabras a los comensales, así como el misionero Manuel Fontanet Servita, quien después de tantos años de misionero en África, explicó algunas de sus múltiples vivencias en este continente con personas tan necesitadas.
Previamente, en la Iglesia, se explicó la campaña y el trabajo de Manos Unidas.
Asistieron a esta cena unas 80 personas, se notaron muchas ganas de reunirse después de dos años si poder celebrar la cena presencial a causa de la pandemia.
Las compañeras de Pego agradecen al Convento su apoyo por cederles el lugar para la celebración, así como a los lugares en los que ofrecían los tickets: parroquias de Pego, Bar el Moss, Papelería Isabel, Carmelo Dentista, Mercería Raquel Miralles y Cristalls Sendra.
Gracias a todos por su esfuerzo para sacar adelante esta celebración solidaria.