La comarcal de Ontinyent ha organizado una doble celebración de cena del hambre en dos días diferentes, uno de ellos en la parroquia de san Rafael y otra en San José.
Esta cena austera consiste en tomar una comida sencilla, pan con aceite, agua y una fruta, y reflexionar sobre la injusticia del hambre en el mundo. Este es el principal objetivo de este acto benéfico, sensibilizar sobre las necesidades de los pobres, y también, recaudar fondos para paliar esta situación. Por una noche, nos ponemos en la piel de los que son tan pobres que no tienen qué comer, ni tampoco sanidad, ni educación.
Los voluntarios trabajaron mucho para llevar a cabo esta cena solidaria, que se completó con una rifa gracias al apoyo generoso del comercio local y de muchas personas.
Para hablar sobre el trabajo de Manos Unidas se tomó como ejemplo el proyecto “Mejora de la atención sanitaria y prenatal en Dimbroko”, Costa de Marfil.
Gracias a todos los que han colaborado de forma desinteresada en esta Cena del Hambre.