«A causa de la pandemia, la cifra de comensales a los que servimos diariamente en nuestro comedor ha aumentado hasta 90 personas. Con la pandemia han subido los precios, no hay agua... y gracias a este apoyo podemos servir a muchas más familias y ha mejorado nuestra alimentación diaria».
Aida Milagros Roca agradece a Manos Unidas y la asociación Kusi-Warma el apoyo recibido en un momento en el que el confinamiento y la pandemia afectaron gravemente a la población de Puente Piedra, en el altiplano peruano; una región ya marcada por las privaciones y la escasez.