¿Te imaginas vivir sin agua? Impensable, ¿verdad?... y más ahora que es tan necesaria para prevenir el coronavirus y evitar contagios.
Sin embargo, más de 2.000 millones de personas carecen de agua potable y medidas de saneamiento, lo que les aboca al hambre y la enfermedad. Y lavarse las manos, un gesto tan cotidiano que puede salvar vidas, no está al alcance de todos.
Proporcionarles agua y servicios sanitarios ya era una necesidad, pero ahora se ha convertido en una emergencia.
Por ello, y porque el agua puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte, Manos Unidas lanza la campaña “A veces el agua no cae del cielo”, con la que, gracias a la generosidad de personas como tú, gota a gota esta Navidad podemos transformar la vida de miles de personas.