En el último año, las condiciones que llevaron a declarar la alerta alimentaria en algunos países del Cuerno de África han mejorado de forma notable aunque la crisis de seguridad alimentaria continúa en ciertas regiones de Sudán del Sur, Etiopía, Somalia, Kenia y Djibuti. Según el “Informe Nº 19 sobre la situación el Cuerno de África. Enero 2013”, publicado por el Banco Mundial y recogido por Reliefweb, todavía hay 12,1 millones de personas que sufren inseguridad alimentaria.
La situación, según el informe, es más acuciante en los hogares más pobres que aún están recuperándose de las escasas cosechas y de la pérdida de ganado, consecuencia de las escasas o nulas lluvias en anteriores estaciones.
Etiopía: Hay 3,8 millones de personas que necesitan asistencia alimentara de emergencia. Las fuentes de agua se están secando en las zonas este y oeste de Harerge en la región de la Oromía. Además, como consecuencia de las escasas lluvias estacionales hay 400 personas afectadas. El gobierno local organizará el suministro de agua con camiones.
Por su parte, en la región del Tigray la escasez de agua afecta a ocho distritos y 179 mil personas en riesgo. En el resto del país se esperan cosechas regulares.
Kenia: Hay 2,5 millones de personas que padecen inseguridad alimentaria, sobre todo en las regiones costeras y del sudeste del país. La mayor parte de la asistencia alimentaria está concentrada en los refugiados, en los granjeros y pastores a pequeña escala de las zonas en riesgo.
Los precios del maíz continuarán siendo elevados lo que limita el acceso a la comida de los hogares. A estas carencias hay que añadir el deterioro en las oportunidades profesionales. Con esto, muchos hogares del país siguen siendo vulnerables a todo tipo de desastres.
En contrapartida, la producción ganadera ha mejorado en las áreas de pastoreo lo que ha llevado a que suban los precios en los mercados y a que haya más leche disponible para el consumo. Cada vez hay menos niños en riesgo de malnutrición.
MSF ha manifestado su preocupación por el decreto del Gobierno de Kenia que pretende trasladar a miles de refugiados somalíes de las áreas urbanas a los campos de Dadaab. Cualquier cambio podría empeorar, según MSM, la ya de por sí tensa situación en los campos, que albergan a 96.000 refugiados. En total, Kenia da cobijo a 566.487 refugiados la mayoría de los cuales salieron de Somalia por causa de la sequía y del conflicto.
Somalia: Los últimos informes mantienen la cifra de personas que necesitan ayuda humanitaria de emergencia en 2,1 millones. Además, todavía hay 236.000 niños con malnutrición severa. Además, ACNUR estima que todavía hay 1,1 desplazados internos por el conflicto y por la sequía y que otro millón vive como refugiados fuera del país. Los desplazados internos siguen siendo más vulnerables debido, principalmente a la situación de conflicto.
Sudán del Sur: tres millones de personas necesitan todavía asistencia humanitaria inmediata. Las agencias humanitarias han expresado su preocupación por los ataques que tuvieron lugar a finales de diciembre en Kiir Adem cerca de la frontera del norte. Las primeras cifras hablan de 700 desplazados. En 2012 hubo más de 174.000 desplazados por el conflicto. Además, el país alberga a 160.000 refugiados procedentes de la RDC.
Djibuti: Hay 70.000 personas afectadas por la inseguridad alimentaria en todo el país, sobre todo en las zonas de pastoreo del noroeste. A pesar de las lluvias favorables del pasado noviembre, todavía hay hogares que dependen de la ayuda para poder comer. La misma situación se presenta en las barriadas de los alrededores de la capital, donde, además, se ha producido un incremento en los precios.