Recientemente, dábamos a conocer la cifra de personas que pasan hambre en el mundo -805 millones-, recogida en el informe “El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo 2014” (SOFI en inglés), que publican anualmente la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA). Pues bien, en ese mismo mundo donde una de cada nueve personas no tiene acceso a los alimentos necesarios para el normal desarrollo y para llevar a cabo una vida activa y sana, se pierden o desperdician anualmente 1.300 mill. de toneladas de alimentos.
Contrariamente a lo que muchos pudieran pensar, la pérdida y el desperdicio de alimentos (PDA) no se limitan solo a los hogares, sino que se dan a lo largo de toda la cadena de suministro, desde la producción agrícola inicial hasta el consumo final. Y las causas pueden ser accidentales o intencionales: problemas en la recolección, el almacenamiento, embalaje, transporte o de infraestructura. También los mecanismos de mercado, los de los precios y así como los marcos institucionales y legales son, causantes de esa menor disponibilidad de alimentos para todos.
¿Y cómo repercuten la pérdida y desperdicios de alimentos en la seguridad alimentaria y la nutrición? El Grupo de alto nivel de expertos en seguridad alimentaria y nutrición (HLPE en inglés), autores del informe “Las pérdidas y el desperdicio de alimentos en el contexto de sistemas alimentarios sostenibles”, señala tres consecuencias principales:
El HPLE recomienda a los Estados y las organizaciones internacionales que “mejoren la integración de perspectivas basadas en las cadenas y los sistemas alimentarios en toda estrategia o medida relativa a la seguridad alimentaria yla nutrición. Lareducción de las PDA debería considerarse y evaluarse sistemáticamente como modo potencial de mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de los sistemas agrícolas y alimentarios en aras de la seguridad alimentaria yla nutrición. Deberíananalizarse las causas directas e indirectas de las PDA en un sistema dado para determinar los puntos críticos en los que sería más eficiente actuar”.
Manos Unidas está presente como miembro de la sociedad civil en la 41ª sesión del Comité de Seguridad Alimentaria (CSA) de la FAO. Duranteestos días hemos asistido a las mesas redondas sobre políticas, basadas en los informes del Grupo de alto nivel de expertos, en relación con “Las pérdidas y el desperdicio de alimentos en el contexto de sistemas alimentarios sostenibles” y “El papel de la pesca y la acuicultura sostenibles para la seguridad alimentaria y la nutrición”.