Manos Unidas se suma al llamamiento del papa Francisco para que se ponga fin al conflicto.
Manos Unidas pide un alto el fuego inmediato para salvar la vida de miles de inocentes atrapados por la guerra entre Israel y Palestina, y expresa su conmoción y preocupación por los acontecimientos que están sucediendo en Tierra Santa, con la pérdida de miles de vidas y una enorme crisis humanitaria. Y se suma al llamamiento del papa Francisco para que se ponga fin al conflicto.
Una situación que ha obligado a paralizar todos los proyectos de desarrollo que apoya Manos Unidas en la región, que abarcan desde la atención sanitaria básica a la población rural o a la población palestina y migrante, programas de educación para niños con discapacidad, de formación profesional, de salud para las mujeres, de atención a la población refugiada, de defensa de los derechos de las mujeres víctimas de la violencia o el acceso al agua potable y al saneamiento.
«¡Que no se derrame más sangre inocente (…)! ¡Basta ya! ¡Las guerras son siempre una derrota, siempre!». Papa Francisco.