El presidente interino de Malí, Dioncounda Traore, ha pedido, en su último discurso, la unión de los malienses para hacer frente a aquéllos que están causando tanto dolor en el norte del país.
Esta comparecencia televisada ha sido la primera tras su regreso a Malí, el viernes, después de una ausencia de dos meses, en los que estuvo recuperándose en Francia de las heridas que sufrió en un intento por terminar con su vida perpetrado por los partidarios del Golpe de Estado militar que depuso, el pasado mes de mazo, al anterior presidente Toure.
Traore, a quien se acusa de no haber sido capaz de solucionar la crisis que ha dividido, literalmente, el país en dos zonas enfrentadas, hizo un llamamiento para que los malienses se perdonen unos a otros y que unan sus esfuerzos para terminar con la crisis política en el sur y para lograr la reunificación del país.
"Dada la complejidad de esta crisis y la profunda angustia de nuestro pueblo en el norte... como patriotas y demócratas debemos despejar juntos, y digo juntos, el camino a seguir para liberar a nuestro país de todos estos invasores (narcotraficantes y terroristas religiosos) que solo llevan consigo desolación, privaciones y dolor", afirmó refiriéndose a los grupos de islamistas radicales (apoyados por Al Qaeda en el magreb) que, aprovechando los días de desgobierno en el país, se hicieron con el poder en el norte, donde pretenden crear un estado independiente en el que impere la ley Sharia.
El discurso de Traore coincide con el anuncio de la cada vez más cercana posiblidad de una intervención militar para restablecer el orden constitucional en Malí por parte de la Comunidad de Estados de África Occidental (CEDEO), que podría contar con el apoyo de países de la Unión Europea. "Malí no está solo, no estará solo en el combate que va a emprender por la democracia y el desarrollo. Igual que los malienses hemos dado a otros nuestra solidaridad, ahora recibimos la solidaridad de otros en la salvaguarda de nuestra integridad territorial”, añadió Traore, quien dejó claramente la puerta abierta a una intervención militar extranjera en el país para “liberar” el norte. “La Cedeao, la UA y la ONU no son nuestros enemigos, debemos aceptar la solidaridad que nos ofrecen para reconquistar nuestro territorio”, dijo.
En este sentido, el Gobierno de España ha extendido a todo el territorio de Mali la alerta por posibles secuestros y atentados terroristas, y aconseja, en su página web, no viajar al país africano.
"Debido a la presencia de elementos de Al Qaeda en el magreb Islámico (AQMI) en la región del Sahel, y la presencia de bandidismo, el riesgo de secuestro de ciudadanos occidentales se ha intensificado en los últimos años. Se han venido así produciendo varios secuestros en la región del Sahel, habiendo sido asesinados los rehenes en algunos casos", recomienda Exteriores.
Además, debido al riesgo de un conflicto armado en el norte de Malí y. fundamentalmente, a la inestabilidad en la zona del Sahel, a lo largo del fin de semana han sido repatriados los cooperantes españoles de los campamentos de Tinduf, en Argelia.
Así las cosas, el ministro de Asuntos Exterioresy Cooperación, García-Margallo, señaló ayer domingo que la Unión Africana y la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) ha solicitado al Consejo de Seguridad de la ONU una resolución que dé cobertura a una operación militar en Mali no sólo para respaldar las instituciones de transición en Bamako, sino también para hacer frente a los grupos terroristas que se han adueñado del norte del país.