Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
El proyecto se sitúa en Beré al sur del Chad uno de los países más pobres del mundo, el 61% de la población vive por debajo del nivel de la pobreza. El mal gobierno tiene al país en una situación de crisis permanente agravada este año por las restricciones impuestas a causa del Covid 19. Todos los servicios públicos funcionan mal y entre ellos los servicios de salud, con una gran insuficiencia de infraestructuras, personal sanitario y equipamiento.
Las principales causas de las consultas hospitalarias son el paludismo, infecciones respiratorias, tuberculosis, anemias, enfermedades diarréicas, traumatismos, SIDA, infecciones de la piel y la malnutrición crónica severa de los niños. De manera general el acceso a los medicamentos es limitado y existe un mercado ilícito de falsos medicamentos .
Resumiendo, todos los indicadores de salud son malos o muy malos, sobre todo en lo que se refiere a la salud maternal y la mortalidad infantil. El Chad es el sexto país del mundo con menos partos atendidos por personal sanitario. La tasa de mortalidad materna es de 856 por cada 100.000 nacidos vivos.
La proporción de establecimientos de salud para medir el acceso a los servicios externos de salud es de 0,9 establecimientos para 100.000 habitantes ( la OMS recomienda 2 establecimientos para esa población). Beré es una pequeña población de 28.000 habitantes, que cuenta con dos Centros de Salud y está unida a dos ciudades más importantes por una carretera impracticable en la estación de lluvias.
Piden apoyo para la construcción de un nuevo Centro de Salud que la diócesis de Laï ha iniciado, la cual tendría una sala de partos y ya tiene parte de las infraestructuras y del equipamiento básico. Solicitan colaboración de Manos Unidas para completar el equipamiento sanitario, el mobiliario, un medio de transporte para las campañas de vacunación del distrito y construir mas letrinas que diferencien las de hombres de las mujeres. La duración del proyecto sería de un año.
La diócesis contribuye con el 4% y los beneficiarios con un 6% del total. Manos Unidas aportaría el 90% restante.
El proyecto mejorará la salud y el bienestar de las poblaciones rurales del sur del Chad y contribuirá a disminuir la pobreza.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.