Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
El proyecto se sitúa en un barrio marginal de la ciudad de Bafang, en el departamento de Haut Nkam, en el oeste de Camerún. El objetivo del proyecto es conseguir la reinserción socio-económica de un grupo de personas con discapacidades visuales mediante la enseñanza del oficio de cestería, y con la creación de un programa de comercialización de estos artículos. Con este programa se dotará de recursos para superar la marginación social, la mendicidad y la pobreza. En África, el mayor problema para las personas con discapacidades visuales es la falta de comprensión y de ayuda por parte de la familia, ya que la ceguera se considera un castigo.
El proyecto trata de elevar los ingresos de la Asociación de ciegos de Bafang con la formación de sus miembros en el oficio de cestería, y la producción de artículos para su venta. Con este proyecto y otros semejantes, se contribuirá a mejorar la calidad de vida de las personas discapacitadas del Camerún, un país, que aunque es rico en petróleo, madera, café y cacao, tiene muy poca inversión estatal en educación, sanidad y carreteras, y donde la esperanza de vida al nacer es del 51,7 % de la población, el 32,8 % vive bajo el umbral de la pobreza y un 26 %, no tiene acceso al agua potable.
De las 286 personas con ceguera que viven en el departamento de Haut Nkam, 271 no tienen trabajo y viven en situación de dependencia. La Asociación para la Formación y Reinserción Social de los Ciegos de Haut Nkam, se fundó en 1999. Es una Asociación sin fines de lucro y que se ocupa de la alfabetización de jóvenes con ceguera mediante la escritura braille, y de formación en oficios como la cestería.
El programa de formación tiene una duración de tres meses, y pretende que al finalizar, los alumnos puedan instalarse por su cuenta y obtener recursos para mantener a sus familias. A las personas que ya han recibido formación se las capacitará para ser formadores.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
