Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
Con este proyecto se contribuye a la construcción de cuatro aulas para 80 alumnos de educación primaria, que, actualmente se ven obligados a recorrer casi 6 km dos veces al día para acudir a la escuela.
Solamente hay cuatro aulas de educación infantil, y por lo tanto, al terminar este ciclo, los niños que quieren continuar su formación deben caminar alrededor de 6 km para llegar a centros escolares que se encuentran más alejados.
Ruanda, país situado en la Región de los Grandes Lagos de África Central, está viviendo una época de transformación desde el punto de vista socio-económico, que provoca una gran diferencia de nivel de vida entre su capital, Kigali, y las zonas rurales. La brecha de desarrollo entre el campo y la ciudad se hace cada día mayor, y el cambio en el modelo agrícola de producción es un reto que se ha marcado el Gobierno, que necesita no sólo aumentar la producción, sino mejorar y crear los cauces comerciales con otros países.
La educación es otra de las preocupaciones de la población y del Gobierno, pero como éste carece de los medios necesarios para paliar la escasez de instalaciones escolares, el Centro Escolar Saint Pierre de Kimisagara en la Archidiócesis de Kigali y perteneciente a la Congregación de los Misioneros de Nuestra Señora de África, se ha propuesto reforzar la Educación Primaria y la Educación Infantil.
La Congregación solicita a Manos Unidas su colaboración para la construcción de 4 aulas para alumnos de Educación Primaria. El socio local y los beneficiarios contribuirán con la adquisición del terreno, contratación de personal y el equipamiento de dichas aulas, lo que equivale al 35 % del presupuesto total. El proyecto tiene una duración de 12 meses.
La población de la parroquia S. Pierre de Cyahafi, a la que pertenece el proyecto, está en una barriada pobre, cuyos recursos son casi exclusivamente agrícolas y que sufre los problemas derivados de su aislamiento como son: paro, falta de formación, VIH, pobre escolarización y familias numerosas, muy frecuentemente monoparentales.
La falta de atención a los niños de corta edad, que deben prepararse para iniciar su educación, es un verdadero problema en la zona.
Las familias han participado a través de la parroquia, regida por los Misioneros de África (Padres Blancos), solicitando en sus reuniones un apoyo para solucionar el problema de edución de los niños más pequeños. Tienen en marcha una escuela infantil de 2 aulas y quieren que los niños puedan continuar primaria sin tener que cambiar de centro y caminar entre 5 y 6 kms de media. La parroquia ha adquirido unos terrenos para construir la escuela y terreno de juegos. Miembros voluntarios de la parroquia plantarán árboles y se encargarán de la limpieza y mantenimiento del área de ocio.
El objetivo fundamental es mejorar la escolarización en la zona semi rural de Kimisagara mediante la creación de una escuela primaria.
Y como objetivo general es mejorar la calidad de la educación primaria en Ruanda.
La parroquia tiene en marcha una escuela infantil de 2 aulas y las familias solicitan la creación de una primaria para que los pequeños no tengan que buscar otra escuela. En los alrededores sólo hay escuelas públicas a una distancia de 4 a 6 km. El Gobierno tiene un programa de "Educación para todos", pero al no poder cubrir las necesidades de todos los sectores, apoya las iniciativas privadas dirigidas a mejorar el sistema de educación existente. En colaboración con las familias de los niños que actualmente están en la escuela infantil, y después de reuniones y entrevistas, se ha estudiado la posibilidad de dotar a la parroquia de una escuela primaria ubicada en los terrenos adquiridos para tal fin.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
