Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
Hace casi 25 años se abrió en la región de Kara, Togo, el Centro de Enseñanza Don Bosco para jóvenes sin recursos que se ha deteriorado mucho con el tiempo y amenazaba ruina.
Desgraciadamente, la mala calidad de los materiales de construcción y la climatología tan extrema han provocado fisuras en el edificio de internado, y ha sido necesaria su destrucción parcial para evitar males mayores. La capacidad de acogida quedó muy limitada. La comunidad Salesiana solicitó la colaboración de Manos Unidas para la construcción de la planta baja de un edificio, que constará de 3 aulas de estudio, 1 refectorio, 3 grandes dormitorios y una gran sala de sanitarios, duchas y lavabos. El socio local aporta un 9,2% del total del proyecto que consiste en materiales de construcción y equipamiento.
Por su parte, los beneficiarios aportan mano de obra no cualificada, y de esta manera también realizan prácticas relacionadas con su formación. Lo que quedó del edificio antiguo se ha rehabilitado y servirá de alojamiento a los alumnos más jóvenes que cursan la enseñanza general.
Gracias a este proyecto, se beneficiarán directamente 200 jóvenes de Formación Profesional, de los cuales 50 se alojarán en el internado, e indirectamente al resto de alumnos del centro, que son 500 en formación profesional, y otros 500 en enseñanza general.
La región de Kara, situada al norte de Togo, es una de las más pobres del país, viven de la agricultura. El suelo es muy pedregoso con tierra poco profunda y como consecuencia, los resultados de los cultivos son muy escasos. Lamnetablemente, en ciertos momentos del año, en el periodo que antecede a las lluvias y a las cosechas, se viven momentos difíciles para comer día a día.
Los jóvenes se van a la ciudad en busca de una salida mejor para su futuro (trabajo o estudios); pero debido al coste de la enseñanza y de la vida, muchos no pueden salir adelante y malviven en la ciudad con riesgo de caer en la delincuencia.
Muchas de las familias que viven en la ciudad no pueden mantener a todos sus hijos con los pocos ingresos que tienen, entonces el cabeza de familia abandona a los que van siendo mayores para que se desenvuelvan por ellos mismos, haciendo entrar a sus propios hijos en situaciones verdaderamente difíciles.
Conocedores de estos problemas, el Centro Don Bosco abrió un Centro de Formación Profesional en albañilería, electricidad, carpintería e informática hace 25 años. Este, ha ido creciendo en importancia y en número de alumnos. Al mismo tiempo, abrió también un internado con una función fundamental: facilitar la acogida a los jóvenes que venían a la ciudad de Kara para continuar sus estudios y poder forjarse un futuro.
Este renovado centro cuenta diferentes beneficiarios:
Básicamente, se construye un edificio de una planta, con la posibilidad de añadirle otra planta superior en el futuro. Esta primera planta constará de:
El Centro Don Bosco está reconocido por el Ministerio de Educación y de Formación Profesional y sigue los programas del Estado para cada rama y materia. El Colegio de Enseñanza general está también reconocido por el Estado y sigue el programa oficial del Ministerio de Educación
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
