Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
El proyecto, gestionado por los hermanos jesuitas, se orienta a la promoción de las mujeres que carecen de oportunidades, pero su objetivo final es el desarrollo integral de las poblaciones rurales del interior, que son mayoritariamente tribales.
El proyecto se desarrolla en Dibrugarh, en el estado indio de Assam, situado en el nordeste del país asiático.
Aunque su objetivo final es la promoción integral de las poblaciones rurales del interior, que son mayoritariamente tribales, se dirige muy especialmente a la promoción de las mujeres que carecen de oportunidades (aunque también hay algunos descastados y jornaleros de los campos de té).
Las tradiciones y costumbres ancestrales, las mantienen ignorantes, en su gran mayoría analfabetas y muy limitadas por restricciones de tipo religioso y social. Las mujeres constituyen un grupo privado de estatus social y económico, expuesto a toda clase de explotaciones e injusticias por parte de los patronos y capataces
Ante estas circunstancias, los hermanos jesuitas comenzaron hace más de catorce años a trabajar en la zona para favorecer el desarrollo socioeconómico, educacional, político, cultural y sanitario de las mujeres, jóvenes, niños y de la población más desfavorecida del distrito de Tinsukia. Para conseguirlo:
Los hermanos jesuitas y la población local nos han solicitado la colaboración necesaria para poner en marcha el programa.
Los beneficiarios serán elegidos por los líderes de cada aldea dándose preferencia a los más pobres, atrasados y a aquellas mujeres que carecen de libertad, sometidas al dominio masculino. Además, no se excluirá a nadie por su religión, etnia o cualquier otro distintivo social.
Por todo esto, los beneficiarios directos serán unas 80 personas, mayoritariamente mujeres casadas de 18 a 45 años y jóvenes a partir de los 15 años, que tuvieron que abandonar la escuela.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.