Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
Este proyecto dotará a la escuela de aulas dignas y se aumentará su capacidad de admisión de alumnos.
TÍTULO DEL PROYECTO
AUMENTO DE LA COBERTURA DE EDUCACIÓN SECUNDARIA EN KILIBO.
LOCALIZACIÓN
El proyecto se localiza en Kilibo, República de Benín, en África Occidental. Kilibo es una pequeña población situada a unos 100 Km. Al Sur de Parakou segunda mayor ciudad de Benín
La población de la zona se dedica principalmente a la agricultura de subsistencia y a la artesanía. Gran parte de los alumnos provienen de familias pobres que se dedican al campo. La etnia predominante es la nagot, pero cada vez es más común asistir a la llegada a la zona de nuevos grupos de otras etnias. Todas ellas conviven de forma pacífica.
Las condiciones de vida son duras y austeras y la presencia de escuelas es muy escasa. La población ha ido tomando conciencia de la importancia de escolarizar a los hijos gracias a una importante labor de sensibilización. A pesar de estos esfuerzos, los recursos son insuficientes y los institutos de secundaria escasos. En las zonas rurales hay, además, pocas infraestructuras escolares que impartan una educación de calidad. El hecho de que la educación sea muy deficiente en los Centros públicos obliga a los jóvenes a abandonar los estudios.
El Instituto Saint Gerorges de Kilibo fue construido e inaugurado en el año 2011. Fueron los propios padres de los alumnos, con ayuda de la parroquia, quienes levantaron el módulo de 3 aulas que ocupan actualmente los jóvenes. Se trata de una construcción muy precaria, oscura, calurosa y sin acabar. A medida que fue aumentando el número de alumnos se convirtió el antiguo presbiterio en el cuarto aula del instituto.
Hoy por hoy, el instituto cuenta con 122 alumnos (68 chicas) que cursan los 4 primeros cursos de la secundaria. La precariedad de las infraestructuras del centro obliga a limitar el número de alumnos a pesar de que el número de solicitudes de inscripción no deja de aumentar debido a los buenos resultados académicos.
Conscientes de la dificultad de la situación el director de la Enseñanza Católica de la Diócesis de y junto con los miembros de la Asociación de Padres de Alumnos del instituto de Kilibo se pusieron a trabajar en este proyecto.
RESUMEN DEL PROYECTO
Ante la dificultad de la situación, el director de la Enseñanza Católica de la Diócesis de y junto con los miembros de la Asociación de Padres de Alumnos trabajaron en la elaboración de este proyecto que consiste en la construcción de un nuevo módulo de 4 aulas que aumente la capacidad del centro y mejore las condiciones de estudio de sus alumnos, así como de un bloque de letrinas que garantice unas condiciones higiénico/sanitarias adecuadas.
Manos Unidas aportará el 88% del proyecto, mientras que la aportación local será del 9% en concepto de equipamiento y mano de obra no especializada. El 3% restante correrá a cargo de una Asociación de mujeres local que impartirá sesiones de sensibilización y formación en derechos dirigidas inicialmente a los padres de los alumnos.
Con la realización de este proyecto se dotará a la escuela de aulas dignas y se aumentará su capacidad de admisión. Las nuevas letrinas mejorarán las condiciones higiénico-sanitarias del Instituto. Se da así respuesta al creciente interés de la población por la educación y se luchará contra el alto porcentaje de abandono escolar en la zona.
BENEFICIARIOS
Número anual de beneficiarios directos: 180
Hombres: 80 Mujeres: 100
Número anual de beneficiarios indirectos: 900
Perfil de los beneficiarios: Los beneficiarios del proyecto serán los jóvenes de Kilibo y alrededores que podrán por fin realizar sus estudios de secundaria en unas buenas condiciones. Tienen entre 12 y 15 años y, tras haber obtenido el título de primaria, entran en este Instituto para cursar sus estudios de primer ciclo de secundaria en un Centro de calidad. Los alumnos suman actualmente un total de 122 (68 chicas). La población de la zona se dedica principalmente a la agricultura de subsistencia y al artesanado. Gran parte de los alumnos provienen de familias pobres que se dedican al campo. La etnia predominante es la nagot, pero cada vez es más común asistir a la llegada a la zona de nuevos grupos de otras etnias. Todas las etnias y religiones conviven de forma pacífica. La demanda de plazas escolares de secundaria en la zona está en permanente aumento. A pesar de la política de apoyo a la educación del Gobierno, la falta de infraestructuras comunitarias que permitan que los niños y jóvenes cursen sus estudios, es un hecho. El Estado se ha centrado en facilitar la enseñanza de Primaria, mientras que no alcanza a dar ayudas para la secundaria y todo el peso recae sobre los padres. Conscientes de esta realidad, la Dirección Diocesana de la Enseñanza Católica crea este instituto de secundaria en 2011 en los terrenos de la parroquia.
No existe discriminación por sexo, etnia o religión. No hay un criterio de selección determinado ya que los alumnos, en la actualidad, están acudiendo al Centro. La única condición exigida a los nuevos alumnos es haber aprobado la titulación de primaria.
La población local participará en las tareas de construcción como mano de obra no especializada, garantizando el suministro de agua durante las obras y la vigilancia de los materiales de construcción. Su aporte económico se destinará a equipar el nuevo módulo con los muebles necesarios. Una Asociación de mujeres, a nivel nacional, se encargará de organizar y auto-financiar un programa de sensibilización en derechos fundamentales, dirigido a los padres de los alumnos.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.