Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
El proyecto se sitúa en la ciudad de Lobito, al Oeste de Angola. Es la cuarta ciudad por población del país y la segunda por importancia económica tras la capital. Como ciudad ribereña a las orillas del Atlántico tiene una gran actividad comercial y pesquera, con grandes empresas asentadas en ella. Sin embargo, junto a este desarrollo económico fueron creciendo grandes asentamientos informales. Estas zonas carecen de servicios básicos como electricidad, agua o red de saneamiento y su población carece de competencias profesionales y de unos mínimos de alfabetización. La situación de la mujer y de la infancia es de máxima exclusión social. Viven fundamentalmente de actividades informales como la pesca, la salina, el trabajo doméstico y la venta ambulante. El mercado informal está muy desarrollado en todo el país, y aunque es muy difícil calibrar su peso específico en la economía angoleña, se calcula que ocupa un 70% del total del mercado.El 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud declara pandemia global el virus COVID-19. En Angola se detecta el primer caso el 21 de marzo y seis días después se declara estado de emergencia durante 15 días y con expectativa de prorrogarse hasta la primera quincena de junio. Las restricciones de movimientos impuestas, la limitación de actividades y el confinamiento domiciliario, incluidos en el estado de emergencia ponen al límite a la población más vulnerable como aquellos que residen en asentamientos informales tales como los barrios de Cabaia y A Feira, donde la prohibición de todas las actividades, sumada a una ausencia de ahorros, deja sin ingresos diarios y en una situación muy crítica a un gran número de familias. La mayoría de estas familias carecen además de información sobre la pandemia y su prevención y no tienen a su alcance el acceso al agua necesaria para mantener una adecuada higiene.
Nuestro Socio Local MISEVI (Misioneros seglares vicencianos) lleva años apoyando de manera integral a grupos vulnerables en estos asentamientos y saben que el impacto del virus puede ser preocupante en estos barrios. Han detectado con rapidez y seguridad la situación de emergencia de estas familias encabezadas por mujeres en situación de inseguridad alimentaria y en riesgo de desnutrición. Conociendo muy bien sus carencias y necesidades, existe una preocupacion también por la situación tras el confinamiento que habrá dejado a estas familias sin medios para generar ingresos. Tras la difícil situación económica que atravesarán, la vuelta a la escuela no será una prioridad y arrojará alarmantes cifras de abandono escolar.
Para reducir el impacto del confinamiento por la pandemia en esta población altamente vulnerable, solicitan apoyo a Manos Unidas y el socio local plantea dos líneas de actuación. En primer lugar, durante el confinamiento, formarán y sensibilizarán sobre el virus y medidas de prevención, favorecerán el acceso al agua para estas familias y les entregarán unos kits con productos de higiene y alimentos (alubia, azúcar, harina, maíz, arroz, pasta, aceite, salsa tomate, jabones y lejía). Estos kits se repartirán en dos entregas. Una vez finalice el confinamiento, se facilitará a estas mujeres unos kits para venta ambulante (aceite, jabones, plásticos y lejía), que les permitirá comenzar a generar ingresos y ser autosuficientes y, por último, se entregará a alumnos en situación de vulnerabilidad unos kits escolares (cuadernos, lápiz, goma y sacapuntas) para animarles a su regreso a las aulas. La intervención tendrá una duración de 4 meses. El Socio Local aportará su labor de coordinación, sensibilización, logística y seguimiento de los beneficiarios y asumirá el coste del acceso al agua para las familias, esto supone un 30% del proyecto.
Manos Unidas aportará el coste de los kits de alimentos y productos de higiene, los kits para venta ambulante y los kits de apoyo escolar lo cual supone un 70%. Este proyecto beneficiará de manera directa a 1.083 habitantes en situación de vulnerabilidad grave reduciendo el impacto del confinamiento por la pandemia del Covid-19.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.