Desde India: Algo que merece la pena celebrar estas Navidades

"Después de trabajar con Manos Unidas desde hace unos 45 años, quiero presentar mí ultimo y permanente agradecimiento y aprecio por la ayuda recibida durante tantos años y, mas aún, por las relaciones de amistad y el intercambio de ideas y experiencias con Manos Unidas y sobre todo contigo, durante muchos años". (J. L. Arana). Aprovechamos la misiva para agradecer con ella a todos los socios, amigos, colaboradores, donates y simpatizantes de Manos Unidas su apoyo y confianza.

"Después de trabajar con Manos Unidas desde hace unos 45 años, quiero presentar mí ultimo y permanente agradecimiento y aprecio por la ayuda recibida durante tantos años y, mas aún, por las relaciones de amistad y el intercambio de ideas y experiencias con Manos Unidas y sobre todo contigo, durante muchos años". J. Luis Arana

Nuestra compañera Cayetana ha querido compartir con todos nosotros una carta muy especial, que envía desde Gujarat, en India, uno de nuestros más antiguos colaboradores y amigos, el jesuíta José Luis Arana. No ponemos ni quitamos una sola coma a un mensaje que casi podría ser un resumen de lo que ha sido la trayectoria de Manos Unidas en estos 53 años de vida... Más de cinco décadas de las que ha sido testigo, desde su misión en India.     

Por esto hoy quiero que todas vosotras, por tu medio, sepáis el milagro en el que tenéis una parte primordial. Habéis creado dignidad y felicidad en más de 40.000 familias aborígenes del Sur del Gujarat.  Esto es algo que merece la pena celebrarse estas Navidades.

Aprovechamos la misiva para agradecer con ella a todos los socios, amigos, colaboradores, donates y simpatizantes de Manos Unidas su apoyo y confianza.    

"Querida Cayetana:

Ante todo quiero enviarte mis mejores deseos y oraciones para Navidad y el Año Nuevo.

Ahora, dada mi edad y la presente situación, no tengo intención de meterme en nuevos proyectos. Ya es hora de afianzar los resultados positivos de proyectos anteriores.

Después de trabajar con Manos Unidas desde hace unos 45 años, quiero presentar mí ultimo y permanente agradecimiento y aprecio por la ayuda recibida durante tantos años y, mas aún, por las relaciones de amistad y el intercambio de ideas y experiencias con Manos Unidas y sobre todo contigo, durante muchos años.

Mi primera experiencia con la que seria Manos Unidas, fue hacia el año 1965, cuando todavía erais "Señoras de Acción Católica".

Durante mi estancia en Dediapada, Zankhvav, Dadhwada y Vyara, hemos trabajado juntos en muchos proyectos en favor de los aborígenes, que son un 80% de la población total de la región. Los proyectos han sido de educación, sanidad, riego, comunidad, casas, control de la erosión, cooperativas de leche, reforestación... Gracias a estas y otras ayudas, el nivel de vida y el futuro de miles y miles de familias aborígenes ha mejorado increíblemente. Hoy muchas de ellas son autosuficientes y no dependen de nadie para ganarse una vida acomodada. Me encanta decir que este éxito se debe en gran parte a la cooperación y contribución de la comunidad aborigen de los pueblos donde hemos trabajado. El progreso a todos los niveles durante los últimos 45 años es casi increíble.

Por esto hoy quiero que todas vosotras, por tu medio, sepáis el milagro en el que tenéis una parte primordial. Habéis creado dignidad y felicidad en más de 40.000 familias aborígenes del Sur del Gujarat.  Esto es algo que merece la pena celebrarse estas Navidades.

Felices Navidades para ti y para todas tus compañeras.

Yo sigo muy bien de salud y visitando los pueblos a diario.  Felices Navidades! para todas/os en Manos Unidas. Manos Unidas es ahora parte de mi vida, una parte con la que me siento muy en casa.

Un abrazo". J.L. Arana S.J.

 

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