Manos Unidas ha aprobado hace sólo unos días un proyecto específico para conseguir que la ONG local DARE tenga un nuevo edificio como centro de acogida y rehabilitación de niños y niñas de la calle y ya no tengan que volver a mudarse. Hablamos con el responsable de DARE, el misionero Father Abhi.
Era una cesión por dos años y al final se han quedado allí cuatro años. La Diócesis de Varanasi (Uttar Pradesh-India) había prestado al misionero Father Abhishiktanand, conocido como Father Abhi, sacerdote miembro de la IMS (Indian Missionary Society), un edificio para que su organización DARE (Development Association for Research and Empowermet) pudiera acoger allí a los niños y sobre todo niñas de la calle de entre 3 y 16 años, huérfanos, abandonados o maltratados a los que esta organización rescata en la estación de la ciudad y a los que ofrece un presente y un futuro mejor.
Manos Unidas ha apoyado la labor de DARE desde su nacimiento en 2010, y al saber que la organización se quedaba sin un lugar donde acoger a los pequeños, el 25 de junio se aprobó, en Comisión Permanente, un proyecto específico para conseguir que DARE tenga un nuevo edificio como centro de acogida y rehabilitación de niños y niñas de la calle y ya no tengan que volver a mudarse. Justo en esos días, Father Abhi visitaba España por tercera vez y pudimos hablar con él.
¿Cómo es el nuevo edificio?
Hemos encontrado un edificio que se adapta a nuestras necesidades, está cerca de la estación de Varanasi, y tiene 232 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, pero con posibilidad de construir más plantas superiores en el futuro.
¿A cuántos niños se va a poder ayudar?
Ahora estamos atendiendo a 48 niños y niñas, pero con este nuevo edificio podremos ayudar a 140 niños con edades comprendidas desde los 3 hasta 16 años de edad, que actualmente viven entre las vías del tren y en el slum o barrio marginal situado alrededor de la estación de tren de Varanasi. De ellos se prevé que 50 sean acogidos en régimen de internado, 50 en acogida temporal, y el resto asistirán a los distintos programas y cursos que desde DARE organizamos. De hecho ya estamos dando clases de costura y diseño de ropa en un pequeño “Centro de Diseño de Moda” creado en la estación con 8 máquinas de coser y con apoyo de Manos Unidas y al que asisten 10 adolescentes.
¿Cómo son estos niños y niñas a los que se beneficia con el proyecto?
Varanasi (Benarés), situada a la orilla del río Ganges, es una de las siete ciudades sagradas para el hinduismo, el jainismo y el budismo y la más importante ciudad india de peregrinación para los hindúes. Su estación de tren es una de las más concurridas del país y en sus andenes y en los slums de la ciudad y de sus alrededores (más de 200 reconocidos por el gobierno y más de 400 ilegales) sobreviven y trabajan miles de niños perdidos de sus familias, huérfanos, abandonados por ser niñas, ilegítimos o tener alguna discapacidad o que han escapado de su hogar por sufrir maltrato. La mayoría son dalits o descastados o tribales. Son analfabetos, trabajan limpiando zapatos, vendiendo agua o jabones o directamente piden limosna y comida para ellos y a veces para sus familias, o cometen pequeños hurtos. Algunos además son prostituidos, a veces por sólo unas rupias que equivalen a menos de un euro.
DARE nació para atender y apoyar a estos niños y niñas a los que rescatamos de la calle, devolvemos a sus familias (en caso de que sean niños perdidos) y alojamos en nuestro centro, para atenderles, alimentarles, devolverles su dignidad, ofrecerles un hogar e insertarles en el sistema de educación formal, ofreciéndoles una vida mejor.
(Father Abhi te invita a luchar contra la pobreza en la campaña actual de Manos Unidas "Luchamos contra la pobreza ¿te apuntas?")
Una entrevista de Marta Isabel González. Fotos: Marta Isabel González-Manos Unidas y Sister Manju-DARE