La pobreza en Brasil

Brasil, ejemplo mundial por el logro del rescate de la pobreza a 25 millones de personas

En la última década, cerca de 25 millones de personas abandonaron la condición de pobreza en Brasil, convirtiendo el país en modelo de reducción de la pobreza Los resultados alcanzados son consecuencia del comportamiento positivo del mercado laboral, sumados a la política de valorización del salario mínimo y a la expansión de las transferencias asistenciales, entre las cuales se destaca el programa de transferencia condicionada de Brasil, el programa Bolsa Família.

El Bolsa Família fue instituido en 2003, durante el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, a partir de la unificación de programas de transferencia de ingreso preexistentes. Con el objetivo final de combatir la pobreza y el hambre en Brasil, el programa exige que los hogares beneficiados asuman compromisos en el área de la salud y educación a cambio de una transferencia de renta mensual cuyo valor se establece de acuerdo con la composición familiar.

El prestigio internacional conquistado por el Bolsa Família se debe a su gran cobertura. Hasta abril de 2015 más de 13 millones de personas en Brasil eran beneficiarias del programa. Se consideran elegibles a la recepción del Bolsa Família, hogares clasificados como pobres, cuya renta mensual por persona no sobrepase un valor entre R$77 y R$154, y hogares extremamente pobres, con ingresos mensuales por debajo de R$77.

Aunque el Bolsa Família no haya sido decisivo para la reducción de la pobreza, el programa de transferencia condicionada contribuyó en el 18% para la caída de la desigualdad en Brasil. El impacto sobre la desigualdad sí se debe al hecho de que los ingresos en la base de distribución son muy bajos. Así, estas transferencias de renta, aunque fueran valores pequeños, al focalizarse en la población pobre redujeron las desigualdades que afectaban a una gran cantidad de individuos.

A pesar de los logros sociales obtenidos y que Brasil está entre las diez mayores economías del mundo, todavía más 10 millones de personas viven en condiciones de extrema pobreza en el país. La principal causa de la persistencia de la pobreza en Brasil es la enorme desigualdad de distribución del ingreso. Para cambiar esta realidad, desde 2012 el gobierno adopta medidas para eliminar la diferencia entre el ingreso de los hogares y el valor de la línea de la pobreza extrema, privilegiando las familias con niños.

Sin embargo,  solamente las transferencias de ingreso no garantizan la mejora del bienestar. La protección integral de la población a través de la provisión de servicios públicos de calidad es el principal desafío de las políticas antipobreza en Brasil. Además, el país pasa ahora por una recesión económica que pone en riesgo los logros de los últimos años y limita el presupuesto destinado a la erradicación de la pobreza. Es necesario que el país vuelva crecer económicamente para asegurar la continuidad de los progresos en el área social.

Nicole Caus

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