Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
En las comunidades de la sierra del Estado de Veracruz donde se desarrolla el proyecto, la población es mayoritariamente rural y tiene altos índices de pobreza, marginación y desnutrición. Las comunidades tienen culturas y costumbres muy arraigadas, lo que se expresa en la alta prevalencia de su dialecto que supera el 80% de hablantes de la población total en varios municipios. Las comunidades indígenas tienen vulnerados sus derechos al territorio ya que se ha producido una apropiación estatal y privada de los recursos naturales de los territorios indígenas. El 87% de la población ocupada subsiste con un ingreso de 2 dólares diarios.
A nivel de vulneraciones de los derechos de las mujeres, Veracruz ocupa el tercer lugar en incidencia de mujeres violentadas de todo México. A esto se suma a que cuando las mujeres recurren a los juzgados, se enfrentan a la ausencia de la perspectiva de género e interculturalidad que se refleja en una atención inadecuada por las instituciones encargadas de administrar justicia, donde no existen traductores ni intérpretes capacitados en derechos humanos.
El resultado de esto es la disminución del acceso a la justicia para las mujeres indígenas, en especial aquella impartida por el Estado.
Kalli Luz Marina es una organización civil que promueve y defiende los Derechos Humanos de las mujeres indígenas de la región de las altas montañas en el Estado de Veracruz, México; una de las regiones más pobres en el país. Desde 2007 las fundadoras de la organización, mujeres nahuas de la sierra de Zongolica y Misioneras de la Inmaculada Concepción han generado acciones para la erradicación de la violencia de género y fortalecimiento de la igualdad. Con los años se han sumado mujeres profesionales que han fortalecido a la organización y juntas han seguido impulsando el tránsito de otras mujeres hacia una vida digna y con derechos.
Los años de trabajo, acompañando a Kalli Luz Marina, han tenido como finalidad contribuir a que las mujeres más vulnerables puedan acceder a una vida libre de violencias:
Manos Unidas ha tenido la oportunidad de visitar las zonas de implementación de los proyectos y conocer a las mujeres beneficiarias, sus historias y sus sueños. Ha podido comprender también el riesgo que corre Kalli Luz Marina para hacer su trabajo en un contexto de corrupción e impunidad.
Los beneficiarios directos de este proyecto son 2030 mujeres.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.