Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
La mejora del acceso y participación de los pequeños productores en el comercio de cereales y el impulso de la horticultura bajo invernadero, ofrecerán una mayor seguridad económica y medioambiental a las familias de productores de dos cooperativas.
El Salvador, con una población de 6,2 millones de habitantes aproximadamente, ha dejado de ser un país tradicionalmente agroexportador y se ha ido convirtiendo en un país de industria maquiladora e importador de productos alimenticios básicos. Esta situación es general para todo el país y afecta especialmente a los pequeños productores que han visto cómo los precios de los insumos agrícolas han experimentado un alto crecimiento en estos últimos años.
El proyecto se ejecutará en el Departamento de La Libertad, en el municipio de Tamanique, cuya estructura poblacional es mayoritariamente rural (71 %). Entre los principales problemas que afrotan los pequeños productores de esta zona, se encuentran el debilitamiento y la desarticulación productiva y comercial, el empleo insuficiente, la falta de oportunidades para invertir en el desarrollo agropecuario y la baja calidad de vida, incrementándose la pobreza y los factores que favorecen la migración.
En la zona trabaja la Federación de Cooperativas de la Reforma Agraria de la Región Central (FECORACEN) que está integrada actualmente por 20 cooperativas de diferentes sectores. FECORACEN presenta a Manos Unidas este proyecto resultado del análisis realizado por las pequeñas cooperativas ante la necesidad de identificar e implementar una estrategia que dinamice la economía de las asociaciones y que favorezca la disponibilidad y la oferta alimentaria para las familias.
El proyecto va enfocado a mejorar la base económica de los pequeños(as) productores(as) de las cooperativas Acahuaspán y San Isidro:
Las acciones de apoyo a la producción tradicional de granos básicos (maíz y frijol) y a la diversificación productiva sostenible de hortalizas se complementará con formación en manejo y gestión de invernaderos e instalaciones de almacenamiento. El concepto de cultivos bajo invernadero representa el paso de producción extensiva de hortalizas a producción intensiva. El proyecto incluye además tres componentes:
Nos encontramos ante un proyecto que permitirá un salto cualitativo y cuantitativo en las expectativas de familias de pequeños productores, tradicionalmente expuestos a mucha vulnerabilidad económica y medioambiental.
Manos Unidas aportará fondos para equipos y suministros agrícolas y de construcción, capacitación, personal técnico y funcionamiento (87%).
El socio local aportará personal, suministros y funcionamiento, y los beneficiarios contribuirán con mano de obra, terrenos y suministros.
El proyecto beneficiará a 236 pequeños agricultores y sus familias.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.