Lanzamiento del Programa Karonghen 4, la historia de un sueño

Relato del padre Christian Manga desde Senegal.

 

Huertos del Progrma Karonghen. Foto:Manos Unidas

La gran preocupación del padre Christian Manga por la educación y la formación de los jóvenes del sur de Senegal fue el origen de la asociación CPAS (Centro de Promoción Agrícola y Social), nacida en el año 2000 en la comuna senegalesa de Diembéring, localizada en Ziguinchor, en la convulsa región de la Casamance.


Jóvenes beneficiarias del Programa Karonghen. Foto: Adele Lassalas/Manos Unidas.

La cuarta fase del Programa Karonghen (PK4), el nuevo convenio de cooperación puesto en marcha con financiación de la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo) y coordinación de Manos Unidas, que tiene como objetivo contribuir al empoderamiento socioeconómico y sociopolítico de las mujeres, a través del fortalecimiento de sus capacidades y su acceso a medios de vida, indica que las pretensiones del padre Christian siguen dando frutos en el castigado sur de Senegal.

Mujeres del programa Karonghen (AECID). Foto:Pablo Echeita/Manos Unidas
Mujeres del Programa Karonghen (AECID). Foto: Pablo Echeita/Manos Unidas.

«Mi deseo, a través de esta asociación, ha sido ayudar a las personas a obtener, por sí mismas, los medios con los que mejorar sus condiciones de vida», explicaba recientemente el sacerdote senegalés.

Esto ha requerido la implementación de proyectos de desarrollo, proyectos de generación de ingresos a partir de la agricultura, la ganadería y, también, proyectos para el bienestar de las poblaciones, a través de la educación, la salud, las mejoras hidráulicas y la protección del medioambiente, en los que, desde hace muchos años, colabora Manos Unidas.

«El desarrollo que quería para mi gente estaba dirigido a una transformación y una apertura de mentalidades para lograr el autocuidado total. Un proceso difícil que requiere tiempo, pero que es posible», asegura el padre Manga.

El padre Christian Manga con algunos de los miembros del prograrma Karonghen
El padre Christian Manga con algunos de los miembros del Programa Karonghen.

Todo ello comenzó con la puesta en marcha de una granja que, aunque no cumplió plenamente con las expectativas, permitió la creación de la FADDO (Federación de Apoyo al Desarrollo del Departamento de Oussouye) y el nacimiento de los exitosos Programas Karonghen, «que –asegura Christian Manga–  nos permitieron avanzar mucho en la búsqueda de nuestros objetivos y desafíos a cumplir».

El padre Manga en el lanzamiento del PK4. Foto: Ana Perez/Manos Unidas en Senegal
El padre Manga en el lanzamiento del PK4. Foto: Ana Pérez/Manos Unidas en Senegal.

Con motivo de la inauguración de Karonghen 4, el sacerdote muestra su satisfacción por los logros obtenidos a lo largo de estos años: «Mis expectativas aún requieren mucho esfuerzo, pero mi alegría es grande al ver a las mujeres –que son el objetivo principal de los convenios– ocupar su lugar en la sociedad y ser mucho más valoradas. Compruebo, también, que los jóvenes reciben más y mejor apoyo para su educación y me alegra ver que funcionan las huertas, el procesamiento de productos y la mejora de los alimentos…». Infinidad de avances entre los que no se puede ignorar la mejora en las relaciones de muchas parejas…

«Me doy cuenta, cada vez más, de que estas personas necesitaban urgentemente este apoyo para darles confianza; y la alegría se reflejaba en sus caras», asegura el padre Manga con emoción. Para ello, basta con ver el éxito de los lanzamientos de los cuatro convenios y los discursos pronunciados por las personas implicadas en estas iniciativas. «En estos actos podemos ver su compromiso, la determinación –especialmente de las mujeres– y la participación cada vez más decidida de los representantes electos locales. Incluso podemos notar en la oficina una mayor presencia de mujeres», relata el religioso.  

Programa Karonghen 4. Foto: Ana Pérez/Manos Unidas en Senegal
La presidenta de Manos Unidas y la embajadora de España visitan Karonghen. Foto: Ana Pérez/Manos Unidas en Senegal.

El lanzamiento del cuarto programa supuso, especialmente, un orgullo para las mujeres. El acto contó con la presencia de la embajadora de España en Senegal y la presidenta de Manos Unidas y también, por primera vez, con la presencia de alcaldesas de municipios vecinos. «Ahí se demostró el verdadero liderazgo de las mujeres», sentencia Manga. «Porque fueron todos estos cambios los que he ido alimentando con todo mi corazón».

El padre Christian finaliza agradeciendo sus esfuerzos a la cooperación española, a Manos Unidas y a la coordinación local.

El camino hacia el desarrollo, el camino de nuestras aspiraciones, de nuestros desafíos, de nuestros objetivos y de la lucha por una vida digna es largo pero posible.

CONOCE EL PROGRAMA KARONGHEN 4

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