Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
Mejora de las condiciones socioeconómicas de 70 mujeres localizadas en la capital de Guatemala, a través de un programa de apoyo a poblaciones marginales, en colaboración con la Parroquia Nª Sra. de las Victorias.
La ciudad de Guatemala alberga varios asentamientos -barrios de infraviviendas- ubicados en la zona del barranco del río las Vacas. En dichos asentamientos viven cerca de 18.000 personas, de las cuales más del 20% vive en condiciones de marginalidad: economía informal, viviendas inhabitables sin acceso a los servicios mínimos elementales, hacinamiento, etc.
Las mujeres se ven especialmente afectadas por estas condiciones, ya que hay un elevado número de casos de abandono del hogar por parte de los hombres. Esto provoca que las madres se hagan cargo de la totalidad de las responsabilidades económicas del hogar, afectando también al fracaso escolar ya que, muchas veces, esta situación obliga a que muchos niños y niñas tengan que trabajar para ayudar a la economía familiar y, por lo tanto, abandonan su educación.
Hay una alta incidencia de problemas de salud ya que la falta de recursos económicos dificulta el acceso a los servicios sanitarios. Además, en estas zonas no hay un tratamiento adecuado de residuos, y el río, que se ubica al fondo del barranco, recibe una gran cantidad de desechos de todo tipo. La población no tiene ningún tipo de influencia sobre las decisiones políticas que más les afectan, generándoles una gran indefensión ante las violaciones de derechos, exclusión y baja autoestima. Esto afecta especialmente a las mujeres, debido a la discriminación que sufren y al escaso valor como agentes decisorios que se les asigna socialmente.
Desde hace más de 5 años, la Parroquia Nª Sra. de las Victorias coordina un programa multidisciplinar de apoyo a la población más vulnerable de estos 8 asentamientos y cuenta con un equipo muy bien formado que aborda las situaciones de forma integral.
El proyecto pretende mejorar las condiciones socioeconómicas de 70 mujeres líderes organizadas que residen en los asentamientos. El proyecto trabajará con mujeres que han demostrado un fuerte compromiso con el desarrollo de sus comunidades y empoderamiento de sus congéneres. Éstas recibirán capacitaciones en la elaboración, uso y comercialización de jaleas y conservas de frutas de temporada, elaboración de prendas básicas de vestir y conocimientos sobre medicina natural. Capacitación para ejercer labores de incidencia política y participación comunitaria. Y finalmente se constituirá un fondo solidario para apoyo de todas estas iniciativas, que será manejado por esas mismas mujeres.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.