Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
El dispensario "Mary Immaculate Bahaty Dispensary" cuenta con un ala de maternidad prácticamente terminada. Ahora se solicita ayuda para adquirir el equipamiento necesario para atender a las mujeres embarazadas que llegan al Centro.
Bahati es un suburbio del Este de Nairobi, capital de la República de Kenya. Es una zona que con los años se ha ido empobreciendo, convirtiéndose en el destino de familias muy pobres que viven sin instalaciones sanitarias de ninguna clase ni electricidad. Sus ingresos económicos son esporádicos no llegando a superar salarios de 1 dólar al día.
Un 40% de la población de Bahati vive en asentamientos de chabolas. Las mujeres embarazadas de esta zona viven en condiciones de mucha pobreza y muchas de ellas son las únicas responsables del cuidado de los hijos. Existe una falta total de medios sanitarios para atenderlas y las tasas de mortalidad son muy altas.
Las Hermanas de María Inmaculada tienen el dispensario "Mary Immaculate Bahati Dispensary" desde 1969 y han comprobado la necesidad de aumentar la capacidad del mismo y construir un ala de maternidad, porque actualmente no pueden atender a todas las mujeres embarazadas por falta de medios. El ala de maternidad se ha construido gracias a las aportacionas de Cáritas Italiana en 2008 y la Conferencia Episcopal Italiana en 2013.
En febrero de 2015 Manos Unidas visitó el dispensario comprobando que tiene unas instalaciones sencillas y muy prácticas. El ala de maternidad estaba prácticamente terminada pero solicitan ayuda para adquirir el equipamiento de:
La aportación local será del 4,3% de los equipos a comprar.
El proyecto dará asistencia sanitaria a 4.800 pacientes anuales, de los cuales 3.600 son partos, 1.000 son niños de post y prenatal y 200 son pacientes en salud reproductiva.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.