Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
La comunidad de Nueva Vida surgió hace dos décadas en Ciudad Sandino, Managua, como respuesta humanitaria al huracán Mitch. Actualmente, este barrio se considera prioritario debido a su vulnerabilidad, marginalidad y carencia de servicios públicos.
La población de Nueva Vida, que ha crecido hasta 10.000 habitantes, enfrenta desafíos económicos, con muchos parados o subempleados en trabajos mal remunerados y poco especializados.
El proyecto aborda la violencia contra las mujeres y el abuso sexual infantil para disminuir los índices de violencia y abuso en el barrio. Las causas incluyen un modelo machista arraigado y la dependencia económica de las mujeres. La carencia de recursos para abordar la violencia y los abusos sexuales refleja la limitada presencia institucional para resolver esta problemática.
El proyecto, de 7 meses de duración, beneficiará directamente a 1.985 personas e indirectamente a unas 3.000. Se centra en promover la equidad de género y prevenir la violencia contra las mujeres y el abuso sexual infantil mediante la sensibilización, ampliando espacios de atención integral y fomentando especialización y emprendimiento socioeconómico para mujeres víctimas o supervivientes de violencia.
Manos Unidas aportará 70% del presupuesto para equipos y personal local, los beneficiarios y la contraparte local aportarán el 30%. El proyecto está alineado con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) núm. 5, “Igualdad de Género”.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.